Las calibrachoas, también conocidas como petunias de cascada, son plantas de floración abundante que destacan por sus brillantes y coloridas flores en cascada. Con una amplia gama de colores que van desde el morado intenso hasta el blanco puro y el rojo vibrante, las calibrachoas añaden un toque de alegría y vitalidad a cualquier jardín, cesta colgante o maceta. Su hábito de crecimiento compacto y su capacidad para florecer profusamente durante toda la temporada las convierten en una opción popular para embellecer balcones, terrazas y patios. Además, su resistencia a la sequía y su facilidad de cuidado las hacen ideales para jardineros de todos los niveles de experiencia.
Riego:
Las calibrachoas prefieren un riego regular pero moderado. Mantén el suelo ligeramente húmedo, permitiendo que se seque ligeramente entre riegos para evitar el encharcamiento.
Exposición solar:
Prefieren pleno sol para un crecimiento óptimo y una floración abundante. Al menos 6 horas de luz solar directa al día son ideales para estas plantas.
Época de siembra:
Se siembran en primavera después de que haya pasado el riesgo de heladas. También se pueden plantar en otoño en áreas con inviernos suaves.
Abono:
Utiliza un fertilizante equilibrado antes de la siembra para enriquecer el suelo. Durante la temporada de crecimiento, aplica un fertilizante líquido diluido cada 2-3 semanas para promover un crecimiento saludable y una floración exuberante.
